Las juntas de carril aisladas actúan como sistema nervioso central de las líneas ferroviarias, impidiendo que la corriente eléctrica fluya entre los extremos de dos carriles contiguos.
Cuando un tren pasa por encima de un empalme, las ruedas del tren completan el circuito eléctrico, lo que permite a los operadores ferroviarios conocer la ubicación exacta de los trenes en vías férreas complejas y activar las señales de cruce cuando un tren se aproxima a un cruce de carretera.
En el proceso de fabricación, los miembros del equipo de L.B. Foster reciben trozos de carril de acero de 80 pies, los cortan por la mitad y crean una discontinuidad eléctrica colocando un material aislante (Kevlar®) entre las dos mitades. A continuación, refuerzan la unión añadiendo una barra de soporte y unen todos los componentes en su lugar con un epoxi.
Montado en fábrica:
Adherido con epoxi TEMPRANGE® II de alta integridad para una larga duración
Barra de unión de microaleación de contacto total
Ensamblado a la longitud especificada, hasta 60' de largo
Disponible en configuraciones de raíl desgastado/raíl de transición
Montado con pernos A-490 o pasadores (6 u 8)
También disponible ENDURA-JOINT® de larga duración con aislamiento de aramida
KEVLAR® es una marca registrada de E. I. du Pont de Nemours and Company o sus filiales.
La ilustración del producto muestra las características de nuestros conjuntos de juntas aislantes encoladas.
